El Valle de Benasque, un paraíso para los amantes de los deportes al aire libre

Las montañas de más de 3.000 metros dan un aspecto majestuoso a la zona.
Puro Pirineo, descubrir el territorio por los antiguos caminos de la trashumancia.

La Vanguardia, 25 de mayo de 2023

A las faldas del Pico Aneto, y en pleno corazón de los Pirineos, se abre un valle muy particular. Una zona rodeada de gigantes montañas, blancas en invierno y verdes en verano, que admiten prácticamente cualquier práctica deportiva en el medio natural.

Esquí alpino, de fondo y de travesía, raquetas de nieve, alpinismo, senderismo, escalada, parapente, rafting… Mil y una actividades para disfrutar de la naturaleza. Más allá de los ya mencionados, uno de los reclamos estrella del Valle de Benasque es el ciclismo.

Puro Pirineo

La bicicleta como excusa

Desde hace ya muchos siglos, la ganadería ha sido uno de los principales ejes sociales y económicos del Valle. De hecho, gracias a la trashumancia, el movimiento de rebaños según la época del año, se creó una extensa red de caminos, que conectaba esta zona de la Ribagorza aragonesa con los valles próximos de Huesca, Catalunya y Francia y que vertebró el Valle conectando sus diferentes pueblos.

Con la aparición de nuevas vías de comunicación más rápidas y accesibles, los antiguos caminos quedaron en el olvido. Pero estas joyas no se podían dejar perder.

El proyecto Puro Pirineo nació para recuperar estos senderos, que guardan la historia y las vivencias del valle, y que las cuentan a aquellos que las recorren. Actualmente, la red de caminos se ha acondicionado para disfrutar del MTB y del senderismo, siempre rodeados de un entorno privilegiado.

Ermitas románicas y bordas de montaña, gastronomía, leyendas y tradiciones, son solo algunas de las pinceladas que ofrece el Valle de Benasque. Y qué mejor que conocer la zona a través de una gran experiencia en bicicleta de montaña, con un entorno natural de película y unos paisajes inmejorables.

Más allá de las posibilidades de MTB, existen también una gran variedad de pistas para recorrer en bicicleta de gravel o para atreverse con una aventura de bikepacking.

Tampoco hay que menospreciar, ni mucho menos, las opciones para las bicicletas de rueda fina. Las carreteras de acceso a los centros deportivos de Aramón Cerler y Llanos de Hospital, que rozan los 2.000 metros, se convierten en un auténtico reto, incluso para los y las ciclistas más fuertes.

La estación de esquí alpino ha albergado múltiples finales de etapa en la Vuelta España, dejando clara la dificultad y dureza de este ascenso.

Por otro lado, en el fondo del Valle se encuentran caminos y carreteras mucho más asequibles, perfectos para aquellos y aquellas que busquen rutas sin demasiada exigencia.

En definitiva, el Valle de Benasque es un espacio ideal para disfrutar de la montaña en solitario, en pareja, con amigos o en familia. La fusión de naturaleza, deporte y cultura promete una experiencia totalmente diferente, tanto en los meses de frío como de calor.