Cerler finaliza el telesilla a Castanesa en su primera ampliación en 22 años

Heraldo, 24 de octubre de 2021

Aramón ultima los preparativos de la temporada con la puesta a punto de los nuevos remontes en sus estaciones de Formigal y Benasque.

Aramón pondrá a prueba en los próximos días el nuevo telesilla de Cerler, la gran novedad de la temporada de esquí, que permitirá aumentar el dominio esquiable hacia el valle de Castanesa y acercar la nieva aragonesa a Cataluña. Será la primera ampliación de la estación del valle de Benasque desde 1999, cuando se inauguró el de Basibé.

El nuevo remonte a Castanesa ya está instalado, se han construido las estaciones de llegada y salida, montado las 13 pilonas que lo sustentan y tendido el cable a lo largo de 1.399 metros. Ahora se está procediendo a colocar las sillas, para en los próximos días iniciar la fase de pruebas. Esta infraestructura, que parte precisamente del collado de Basibé (2.380 metros) para prolongarse hacia Castanesa, permitirá extender la superficie esquiable hasta los 80 kilómetros y sumar cuatro pistas más: una azul, dos rojas y una negra. https://www.heraldo.es/videoplayer/R5ko26/b/1528502

La última ampliación se hizo hace 22 años, cuando se inauguró el telesilla de Basibé. Desde entonces se han modernizado instalaciones (en 2006 se estrenó el remonte del Rincón del Cielo) y aumentado kilómetros esquiables con nuevas pistas, pero sin extender el dominio.

El telesilla a Castanesa es solo la primera fase de un proyecto más ambicioso que pretende llegar a los 100 kilómetros para conectar con ese valle creando una nueva entrada a la estación cercana a Cataluña, al tiempo que posibilita el desarrollo turístico de un municipio, el de Montanuy, muy afectado por la despoblación. Se hace no sin contestación de grupos ecologistas y algunos propietarios del monte.

No será la única infraestructura de transporte por cable que estrene Aramón. Estos días se ha puesto en marcha en fase de pruebas la de Pico Royo, en Formigal, que permitirá crear dos nuevas pistas, una negra y otra roja, hacia el valle de Izas, y cambia la cota de la estación para llegar a 2.268 m. Se completa con el telesilla de Lanuza, ya construido la campaña 2020-2021 pero aún por estrenar debido a que Aramón no abrió sus estaciones el pasado invierno. La inversión total en los dos últimos años asciende a 20 millones de euros, la mayor cantidad desde la ampliación de Formigal 15 años atrás. Más información

El engranaje de la nieve se reactiva en el Pirineo tras 18 meses de parón casi total

Además del montaje de los nuevos telesillas, las estaciones del grupo de la nieve formado por el Gobierno de Aragón e Ibercaja continúan con los preparativos de la temporada, revisando todos los remontes y los sistemas de innivación artificial para que estén operativos cuando llegue el frío. Los trabajadores inspeccionan los cañones uno a uno. En algunas estaciones, como Formigal-Panticosa, ya se están haciendo pruebas en los sectores de Anayet y Sextas. En otras, comenzarán en las próximas semanas, indicaron fuentes de la compañía. Asimismo, los servicios de alquiler de esquís reparan el material y se ultiman las obras en los edificios de servicios como hostelería, cuidando la madera o repasando la pintura.

Vestir las estaciones

Otro de los cometidos de los trabajadores, concretamente de los píster, es vestir las estaciones: colocar colchonetas en cañones y pilonas, redes en determinadas zonas… Se está finalizando con la formación de los socorristas y colocando y renovando en algunos casos la señalización, como los nuevos mapas de pistas, que en las dos estaciones del Pirineo, Cerler y Formigal, han variado con las nuevas sillas.

Los trabajos que ya finalizaron fueron los de hidrosiembra, donde se aplica una mezcla homogénea de semillas, estabilizadores y fertilizantes con el objetivo de conservar el suelo frente a la erosión y estabilizar los taludes. Según explica Aramón, la nieve se fija mejor sobre este terreno ya que la hierba genera un efecto de manta. De ello se benefician también los ganaderos en verano. Solo en las montañas de Formigal pastan 800 vacas, 100 yeguas y 3.500 ovejas.