Pico Aneto, de Tchihatcheff al vídeo viral de Richart
El Periódico de Aragón, 9 de agosto de 2024
Ser el 3.000 más alto del Pirineo ejerce de imán. Hay auténticos expertos en poner sus botas en la cima del Aneto. Escaladores que buscan vías nuevas, otros que repiten tramos más expuestos para llegar a la cruz. Y también quienes lo ponen como objetivo sin experiencia ni conocimiento y que llegan al Puente de Mahoma, ese estrecho tramo de 40 metros con tremendas caídas en ambas vertientes y se atascan. Hay quien se queda impresionado y las prisas suelen ser malas consejeras como la presión que se ejerce sobre la persona que cavila, que duda en el momento de afrontar un paso nada aconsejable para quienes se sienten atraídos por el vértigo.
Desde que Platon de Tchihatcheff hiciera cima liderando una expedición junto al botánico normando Albert de Franqueville un 20 de julio de 1842, el Aneto ha sido y es protagonista de muchas historias. La última tremendamente viral con una persona descendiendo sobre el nevero con la nieve bastante dura por el frío de la noche anterior y la altitud. Un paso donde la confianza suele jugar a la contra. El protagonista de la historia viral fue captado sin crampones, ni piolet, ni mochila y, por tanto, sin ropa de abrigo ni comida ni bebida. Y esto implica que se puso en riesgo.
Muchos son quienes confían en el paso de ese nevero con la esperanza de que se haga camino por quienes han ido antes, y luego el calor, con la nieve más blanda abriga la esperanza de una mayor sensación de seguridad y no sea necesario el uso de piolet ni de crampones (y saberlos manejar porque no basta con llevarlos). Pero en la montaña dos más dos no suelen ser cuatro, porque no todas las noches son iguales.
Pensar antes de actuar
En una sociedad donde lo mediático es poderoso, donde las redes sociales actúan como un mecanismo compulsivo de populismo es necesario tener tiempo suficiente para pensar cuando hablamos en este caso de montaña, de alta montaña. El Aneto es el 3.000 más alto del Pirineo, pero está claro que no es el único, y que hay montañas por debajo de esa altitudque es necesario afrontar antes de buscar la cima.
Además, siempre se habla de subir y de forma consciente o inconsciente nos olvidamos que el ascenso es solo la mitad de la excursión. Lo importante y debido al cansancio, lo más peligroso viene después: en el descenso. Y es que toda excursión termina cuando uno vuelve al punto de partida. Hasta ese momento, la actividad sigue viva, con más o menos intensidad, pero viva.
Aspectos clave
La forma física para afrontar este reto es fundamental, pero no es el único condicionante. Clave es el horario. La recomendación es con el autobús que te deja en El Vado a las cinco de la mañanao tras el primer desayuno en el refugio de La Renclusa. Además, saber emplear el material es determinante.
Según las encuestas realizadas por Montaña Segura en 2023, un 10% de las personas consultadas iban con crampones, pero sin piolet y un 14% no llevaban ni una cosa ni la otra.
Además, en nieve es fundamental llevar pantalón largo y saber autodetenerse con el piolet. Item importante, los bastones, en caso de intentar detenerse sobre el hielo es igual que hacerlo con los dientes. Además de molesto, imposible.
Confiar en un guía y asistir a charlas
Subir al Aneto con un guía es más que recomendable. Son quienes mejor conocen el territorio con sus particularidades y de quien nos debemos fiar a la hora de ir por la mejor ruta posible. Con el fin de conocer mejor la montaña de las montañas del Pirineo, también es recomendable asistir a las charlas que todos los miércoles y jueves en lo que queda de agosto se celebran de 18.00 a 19.00 horas en el Palacio Condes de Ribagorza, calle Mayor 6, en Benasque.